sábado, 9 de septiembre de 2017

Dios no juega a los dados

Y yo tampoco.


Es conocida la frase que titula esta entrada por haber sido formulada por Einstein a cuento de la teoría Cuántica de la materia en la que las cosas ni son ni dejan de ser sino que tienen una cierta probabilidad de ser.
El motivo de que yo no juegue a los dados se debe a una partida del juego de la oca con mi compadre Marc hace muchos años.
Corría el final de curso 1987-88.
Estábamos en la sala de profesores de la escuela de secundaria de Barcelona en la que ambos impartíamos clases de Matemáticas..
No sé de dónde apareció por allí un tablero del juego de la oca y un cubilete con el correspondiente dado. Como estábamos a la espera de que los demás compañeros terminaran sus labores administrativas, decidimos ponernos a jugar.
El resultado fue que Marc llegó al final del tablero mientras yo aún no había alcanzado la primera oca.
Las dos secuencias de resultados tenían exactamente la misma probabilidad. Sin embargo, él había llegado al final del tablero y yo aún tenía que alcanzar a la primera oca. Por eso decidí no volver a jugar nunca más a los dados
Y cuento esto porque, después de 8 años he vuelto a la casilla de salida en mi tarea investigadora.
Como comentaba hace unos días, han pasado ocho años desde la última vez que ne puse a trabajar en mi tarea investigadora.
Y se hace realmente cuesta arriba eso de retomar una tarea investigadora después de tanto tiempo.
Afortunadamente, de mi época de Ingeniero de Sistemas aprendí a documentar todo mi trabajo y eso me ha permitido situarme en un punto lógico para volver a trabajar.
Así que ahora he regresado.
Cualquier lector que haya abandonado por una temporada sus estudios universitarios y luego los haya retomado sabe de qué le estoy hablando.
En mi caso se suma, además que la causa de este parón intelectual ha sido una lesión cerebral que ha mermado enormemente mi capacidad de concentración. Además, no estamos hablando de memorizar una serie de temas para presentarme a unas oposiciones. Aquí de lo que se trata es de desarrollar una tarea científica de creación de conocimiento que me permita generar un trabajo digno de ser publicado en Astronomy& Astrophysics.
He recordado por qué elegí el último catálogo que elegí para mi trabajo y la causa no es otra que  en el catálogo Ginebra- Copenhague figuran de forma explícita las velocidades heliocéntricas de las estrellas del entorno solar que es justo lo que necesito para poder llevar a cabo mi análisis estadístico conforme al algoritmo desarrollado.

La verdad que resulta extremo complicado pues tras tanto tiempo inactivo y sumando los déficits fiiológicos provocados por el accidente - especialmente el déficit de atención/concentración- se me hace muy cuesta arriba recuperar un ritmo de trabajo que me permita volver a publicar en revistas de prestigio.
En mis tiempos de Ingeniero de Sistemas aprendí que lo más importante de cualquier programa informático es que pueda ser modificado  por otra persona mucho tiempo después de su puesta en marcha.
Así que tuve en cuenta esa máxima y ahora no es imposible continuar donde me quedé.
Los programas FORTRAN que codifiqué hace casi 10 años puedo volver a utilizarlos y el algoritmo que desarrollé para el estudio de poblaciones estelares en el entorno solar me he puesto a aplicarlo a datos astrométricos más actuales que los que había utilizado hasta ahora.
Aquí puede juzgar el lector   mi último artículo científico. y decidir si vale la pena continuar.
No es reciente la costumbre danesa de  determinar posiciones astrométricas.Ya en el siglo XVI, desde el observatorio de Copenhage Tycho Brahe realizó las observaciones planetarias que permitieron a Keplñer deducir sus famosas leyes sobre las órbitas planetarias
Carolina y yo junto al observatorio de Copenhage en mayo de 2005


Aquí nuestro último viaje en familia antes del accidente una escapada a Copenhague( mayo de 2005)

2 comentarios:

  1. HOLA SANTI, ME DAS UNA GRAN ALEGRIA AL DECIR QUE VUELVES A RECUPARAR ALGO DEL TRABAJO QUE HACIAS HACE ALGUNOS AÑOS.
    PERO DIME SI A OCURRIDO ALGO INESPERADO, O HAS NOTADO UNA GRAN MEJORIA EN TU ACTUAL ENFERMEDAD ¿QUE OCURRE QUE DE GOLPE TANTA EUFORIA ? DE LA CUAL NATURALMENTE ME ALEGRO Y SEGUIRE TUS PASOS DE FORMA MUY ELEMENTAL.
    LA FOTO ES MUY BUENA Y DE TUS BUENOS TIEMPOS CON UNA HIJA HECHA YA UNA GRAN MUJER Y UN HIJO QUE HOY YA NO PODRIAS TENERLO EN BRAZOS.
    UN ABRAZO
    Manel

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    1. Gracias Manel por tu comentario:
      Lo cierto es que escribí esta entrada como forma de desahogo al verme abrumado por el trabajo.
      La actividad científica es una forma de rehabilitación de modo que me conviene y además me gusta. No tengo la capacidad de Hawking quien lleva 40 años usando esta terapia con muy buenos resultados ya que los afectados por ELA no suelen durar más de dos años.
      Un abrazo.
      Santi

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